La deslumbrante prosa de Isabel Allende esta vez se podrá al servicio de sus recuerdos íntimos y de la visión de su Chile natal. Según confiesa la propia autora, su voluntad era armar la idea que tenía de su país como si se tratara de un gran rompecabezas formado por hombres, mujeres y paisajes. Así, rememorará la casa de la infancia, poblada de mascotas semisalvajes y de fantasmas, de vida en permanente estado de ebullición, donde destaca sobre todas la figura de su abuelo. Más tarde vendrá el abandono del país y la aparición de la nostalgia, tema central de la obra. En su conjunto se trata de un libro ameno, lleno de amor y de humor que reconstruye, desde la evocación, la vida, la felicidad añorada y los espacios más queridos de esta excelente autora chilena.