Es un lujo leer a Martín Gaite. Simplemente emociona. Está novela es una historia de amistad y reencuentro. Una de las mejores novelas que he leído nunca, una de mis favoritas
hace 4 añosSofía Montalvo y Mariana León fueron amigas en el colegio. Sofía, joven imaginativa, de carácter abierto, se ha visto atrapada en una oscura existencia de esposa y madre de familia. Mariana, cuya trayectoria amorosa resulta más confusa que apasionada, se ha convertido en una brillante psiquiatra de moda. Al cabo de más de treinta años, el azar las hace coincidir en un cóctel y el recuerdo de su amistad desencadena en ambas una revolución interior que irá creciendo a lo largo del libro. En este encuentro, Mariana evocó la afición de Sofía por las palabras, animándola a escribir. Con la sensación de quien se dispone a ordenar el cuarto donde se amontonan los miedos, objetos, presencia y fantasías, Sofía estrenará su primer cuaderno. Entretanto, Mariana se ha marchado de Madrid sin avisar a nadie y compone para Sofía cartas que no se atreve a echar al correo, y donde va tomando el pulso a su desintegración psicológica.
Es un lujo leer a Martín Gaite. Simplemente emociona. Está novela es una historia de amistad y reencuentro. Una de las mejores novelas que he leído nunca, una de mis favoritas
hace 4 añosReencuentro de dos amigas de la juventud que a través de sus cartas sin destino, se descubre que a pesar de tener vidas totalmente diferentes tienen un denominador común, la soledad. Y van trayendo, al momento actual, recuerdos que les han dejado huellas en sus vidas.
hace 4 añosLo he terminado con gran esfuerzo. No lo dejé porque a lo largo de su lectura iba encontrando alguna perla que me iba haciendo reflexionar sobre algunos aspectos de la vida, sobretodo en lo que se refiere a la amistad, y además me da muchísima rabia abandonar los libros que empiezo. Es un libro de carácter intimista, donde dos mujeres se escriben y en sus cartas van abriéndose la una a la otra, exponiendo sus crisis afectivas, sus problemas, sus nostalgias del pasado. Pero es una novela demasiada pausada, con un ritmo muy lento y se me ha hecho pesada, además se van por los cerros de úbeda y al lector le cuesta seguirlas en sus reflexiones. Me da la impresión que la autora escribió la novela que le dio la gana a ella, vertiendo todo lo que llevaba dentro, como si fuera un ejercicio de psicoanálisis, y no pensó en el lector. En conclusión, que no me ha gustado.
hace 11 años