Maravilla, lo mejor que he leído de la autora hasta el momento, bastante diferente a otros de sus libros, tanto por temática como por ambientación. No me esperaba un relato tan intenso en tan pocas hojas. Imposible no enamorarse de esos bosques nevados de Nueva Inglaterra, no sentir esa atmósfera solitaria y angustiosa, no empatizar con Ethan y sus desdichas... Te quedas con ganas de mucho más, de saber más detalles de las vidas de otros personajes, de seguir paseando en trineo por los caminos de Starkfield, y en general, de disfrutar de la bella forma de narrar de Edith.
"La nieve era tan pura que los pequeños rastros de los animales del bosque habían dejado en ella intrincados dibujos como encaje, y las piñas azuladas atrapadas en la superficie sobresalían como adornos de bronce."
hace 3 años
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