Antagonía constituye un edificio novelesco articulado en cuatro unidades autónomas interrelacionadas: "Recuento" (1973), "Los verdes de mayo hasta el mar" (1976), "La cólera de Aquiles" (1979) y "Teoría del conocimiento" (1981). La historia, la escritura, la lectura y el pensamiento son las actividades desarrolladas respectivamente en cada una de ellas. Si la recepción de "Recuento" destacó por su visión desmitificadora del pasado, de las otras tres entregas resaltó su concepción reflexiva y rupturista. En su conjunto, Antagonía entraña un ejercicio de memoria, un recuerdo del pasado, no su olvido, que retrata las mentalidades cambiantes de la sociedad española a partir de los años cuarenta del siglo XX. Sin ser una crónica política, ofrece, con lente a menudo irónica, un repertorio de actitudes y lenguajes del pasado y del proceso histórico y cultural que se puso en marcha con la Transición. No hay argumento lineal ni continuo, sino fragmentos yuxtapuestos unidos por resonancias que cuentan la vida del protagonista desde su infancia y lo que él escribe, introduciendo a lo largo del relato variantes y ecos de su vida y de su entorno familiar y social.