Valle-Inclán es un autor clave de las letras españolas del siglo XX. Y estas Sonatas son su más representativo ejemplo de literatura modernista, por lo que tiene de búsqueda de una belleza sensorial, nostálgica y elegante, imprimiéndole su sello peculiar y personal con una prosa llena de ritmo y muy refinada. Las dos Sonatas son relatos más bien cortos donde el protagonista es el Marqués de Bradomín, un "Don Juan feo, católico, sentimental" según las palabras de la tía del protagonista. Es un personaje inspirado en el general carlista Carlos Calderón. El tema es el amor, en cada relato se nos cuenta una de sus innumerables aventuras amorosas. Hay quién ha dicho que los amores que relata están impregnados de un amoralismo provocador, y lo cierto es que en el Otoño, en plena madurez persigue a una moribunda, y en el Invierno viendo llegar ya próxima la vejez, la afortunada es una novicia muy joven, que bien podría ser su hija... En la sonata de Invierno, el protagonista también es herido en un brazo y sufre estoicamente su amputación). Valle-Inclán también lo perdió aunque fue en un asunto no tan heroico como en la obra. El orden cronológico en el que escribe los relatos no sigue las estaciones, puesto que la primera sonata en escribirse fue la de Otoño en 1902, seguida por la de Estío en 1903, más tarde aparece Primavera en 1904, y acaba con el invierno en 1905. Es Literatura con mayúsculas. Muy recomendable.
hace 8 años