Mathilde es una joven inteligente, correcta, una mujer que podría haber llegado a ser maestra si no fuera porque su padre murió cuando ella contaba con tan sólo diecisiete años. Mathilde y su madre, una anciana temerosa, viven de alquiler en un piso de la ciudad alemana de Berlín, siempre con estrechez económica. La decisión de alquilar la habitación que les queda vacía hará que sus vidas cambien drásticamente. Mathilde verá en Hugo, su nuevo inquilino, una vía de escape, la llave que le abrirá las puertas de la independencia. Sin embargo, la joven no tardará en descubrir que, por buenos que sean sus planes, siempre pueden ocurrir fatalidades que hagan que su vida tome otro camino totalmente distinto. La novela está llena de personajes secundarios totalmente imprescindibles para comprender cómo era la Alemania del siglo XIX, un país y una época en los que la vida entre ciudad y campo eran muy diferentes; donde personas de distinta clase social ya podían casarse y ser alcalde de un pueblecito era tan fácil como hacer un examen. Mathilde Möhring, es la obra póstuma del escritor alemán Theodor Fontane, el autor que captó para la posteridad la fanfarronería de los años que siguieron a la guerra franco-prusiana, en sus novelas retrata la sociedad de tiempos de Guillermo II con el conocimiento local del auténtico berlinés.