El Hurlington Club de Buenos Aires es un auténtico rincón de la vieja Inglaterra dentro de Argentina. Allí crece la joven Audrey Garnet. También allí se enamora perdidamente de Louis Forrester, un hombre de espíritu atormentado y brillante, que compone para ella la sonata de Nomeolvides. La tragedia separa a la joven pareja, y Audrey se ve forzada a aceptar en matrimonio a Cecil, hermano de Louis. Pasan los años, Audrey forma una nueva familia, se aleja de sus raíces... pero las notas de la sonata siguen sonando en su corazón, recordándole la magnitud de su sacrificio.