Me encanta Antonio Muñoz Molina y me encanta esta novela. Tiene todos los excesos y toda la ambición de la juventud, todas las virtudes y todos los defectos. Te podrá gustar o no, pero si te gusta Antonio Muñoz Molina, esta es su novela más auténtica porque precisamente es la más defectuosa, la más alambicada, la más pretenciosa, la más equivocada. Es en esa imperfección donde esta lo mas admirable de esta novela. Ahora conocemos al venerable académico pero hemos perdido la pasión de ese joven de Úbeda, lo que le fascinó de la literatura para meterse de lleno en ella. Ese es el valor de esta novela, que habla más de su autor que de sí misma.

Coincido con las dos otras críticas. Fue un libro con el que me tuve que esforzar en leerlo, ya que cambia a menudo la voz del personaje y la época. Me gustó mucho el final. En cualquier caso un bueno libro que hay que leer.

La lectura de esta novela me resultó bastante árida. A ratos no sabía exactamente de qué o quien hablaba. La historia está bien trazada y a ratos deseas que Mágina exista y poder perderte en los laberintos de sus casas señoriales. Pero más allá de eso la historia no consiguió atraparme.

Libro bastante complejo de leer, muy denso y con cambios bruscos en la trama. Desconcertante de tal manera que en ocasiones no sabes de quien habla ni en que momento temporal se encuentra. Sin duda es el estilo que quiere darle Muñoz Molina al libro. Recomendado para quienes le gusten los retos. Al final encajan muchas piezas y hasta te gusta el estilo tan complicado que le imprime el autor, aunque en muchos momentos llegues a pensar en dejarte el libro.