Con la excusa de terminar una traducción, Cèlia Vidal, una escritora barcelonesa, decide huir de la ciudad y se traslada a Lisboa para pasar el invierno. Allí conoce a Eusebio Sena, hombre ya en edad madura, antiguo profesor en Madeira, que fue represaliado en el pasado por la dictadura de Salazar. Eugenio Sena es un personaje singular, que ha vivido un largo periplo existencial, con un halo de misterio que escapa a la grisura y a la mediocridad y que intriga a Cèlia Vidal. A partir de las voces del ex profesor y de la escritora, dos extranjeros en la Lisboa actual, el autor recrea magistralmente el mundo perdido de Sena en Madeira, pone en pie diversos personajes y fantasmas que han cruzado por su vida azarosa, y nos expone las dudas y los anhelos de Cèlia Vidal, mientras una sensación de extrañeza planea sobre esta historia de traiciones políticos y amores frustrados enmarcada en una Lisboa cuya magia, magníficamente plasmada por el autor empapará el ánimo del lector. Es una novela muy bien escrita, con tonos líricos, poética, llena de nostalgias y, a la vez, de serenidad, con honduras anímicas muy bien desarrolladas, sin retórica ninguna.