No dudo de la gran calidad como escritor de Vargas Llosa, pero, quizá debido a mi ignorancia, debo decir que no me gustó de principio a fin este libro.

Estos relatos son verdaderamente buenos. Sin duda, son el reflejo iniciático de este genial y singular escritor. La temática y los personajes -Como por ejemplo Lituma- pronto serán las armas de su producción novelística. En cuanto a "Los cachorros", solamente puedo decir que es una pequeña joya que a veces ha pasado desapercibida. Es una de esas breves perlas realmente estupendas. Merece la pena leerse.

No todas las historias fueron de mi agrado, pero sin duda mi Los Cachorros, El Desafío, Día Domingo y El Abuelo, son para mí las mejores. En la mayoría de las historias existe la violencia y virilidad relacionada; sin embargo, la amistad, el orgullo, la lealtad y la valentía son las cualidades que tienen los personajes. Lo malo, la lectura tienen muchos tecnicismos peruanos, muchos de ellos por el contexto se entiende de que se trata, otros quizá deban ser investigados. El cuento El Desafío, me sorprendió mucho la verdad que se revela, es de los finales inesperados y que no ves venir; Día Domingo me ganó por el nerviosismo durante el clímax. El Abuelo, es un cuento corto pero me ha gustado el personaje y su venganza. Y, finalmente, Los Cachorros, la corona del libro, es la historia de un niño que es mutilado de sus genitales por un perro durante la primaria y los traumas con los que crece, especialmente me ha gustado la manera de narrarlo, no hay un sólo narrador...

Se trata de una colección de relatos cortos de los inicios de la carrera de Vargas Llosa como novelista. Aunque el libro se lee perfectamente en dos o tres días, yo no le he encontrado más valor que conocer las obras completas del autor.

Gran libro de relatos, aunque también me hubiera gustado ver desarrollarse las historias en novelas de más páginas. Claramente centrados en la violencia, en esa violencia masculina y primitiva de las navajas, las peleas y los palos, se muestra a los personajes en toda su cruel y desnuda brutalidad, como si la civilización no hubiera rozado siquiera a las personas y las cosas se arreglan todavía a navajazos, y al mismo tiempo presenta la violencia casi atractiva en su primitivismo, como un modo más sincero y efectivo de solucionar conflictos.

Las distintas historias tienen en común la violencia como método para afrontar distintas situaciones, además de estar asociadas a comportamientos masculinos, como si constituyesen un rasgo asociado a la virilidad o una especie de rito. Me hubiese gustado que alguno de esos relatos estuviese más desarrollado (son tan breves y, al mismo tiempo, están tan cuidados, que parece un primer capítulo de una novela o un primer tratamiento para un libro), especialmente el que da título a la colección, "Los jefes", y "Día domingo", que son mis favoritos. Como es habitual, nada se puede reprochar al estilo de Vargas Llosa, pero a mí me dejan con ganas de más.

De los mejores libros que eh leido.

El primer libro que lei de Vargas Llosa, a partir de él es uno de mis autores favoritos.