Una historia de vampiros algo más que original, personajes magníficamente trazados, llenos de matices, complejos, como las emociones que les envuelven, trátese del amor, el odio, la cólera, la pena o la desesperación. Como en sus novelas anteriores, la escritura de Álvaro Bermejo me ha transportado desde las primeras páginas de Eternamente tuya. He sufrido mientras me adentraba en el destino trágico y cruel de Anna Livia de Montrose. He compartido las pasiones de Valeria y Adriana, la desesperación de Stuart Connolly, cada aparición de la espectral Dama Blanca y hasta la muerte del Vampiro de los Montrose. Una novela para sentir y emocionarse hasta el hueso del alma. No se puede pedir más.
hace 11 años