Resumen

J. M. G. Le Clézio (Premio Nobel de Literatura 2008), que siempre nos sorprende por la lucidez con la que hablan los seres que habitan su obra, escribió este Viaje a Rodrigues, tras la publicación de El buscador de oro. Rodrigues es una pequeña isla de las Macareñas, pero Le Clézio confiesa que a su llegada quedó "totalmente seducido porque es un guijarro en medio del mar; se trata de un islote desértico, sin playa, con los muros que caen en picado al mar. Es un lugar infinitamente salvaje, no es un lugar hecho para el hombre". Ahí, en ese universo volcánico y mineral -elementos que siempre han fascinado al autor- descubre correspondencias entre la topografía de la isla y las constelaciones y adivina en esa coincidencia un componente mítico. Rodrigues, donde supuestamente se esconde el tesoro de un corsario, guarda muchos otros secretos que retienen para siempre a sus visitantes. Ya su abuelo había intuido en ella la armonía del mundo...