Doce personajes y doce capítulos. En cada capítulo un personaje nos cuenta una historia, aparentemente individual pero conforme vamos avanzando en la lectura vamos viendo que todos están relacionados entre sí. Y lo más interesante de todo es que vemos los mismos hechos pero desde diferentes perspectivas, con lo cual podemos llegar fácilmente a la conclusión de que no hay que fiarse de las apariencias, y que las cosas en la vida no son del todo blancas o negras. La prosa de esta autora es fina, elegante, sus personajes están muy bien perfilados y las historias que cuenta atrapan al lector desde la primera página.
hace 8 años