Con su habitual toque costumbrista y su también habitual escenario de fondo (la pampa salitrera del norte de Chile), Hernán Rivera Letelier nos sumerge en las vidas de los pasajeros del tren que recorre por cuatro días esa inhóspita tierra en que, en esos años, la dura vida de hombres y mujeres cuya existencia giraba en torno a las oficinas salitreras, da pie a una serie de historias “medio verdad, medio mentira” que se van desmadejando poco a poco durante la novela. A pesar de no haber un desenlace propiamente tal, el autor tiene la habilidad de envolver al lector, introduciéndolo casi como un pasajero más en esta comunidad que inevitablemente se crea después de varios días conviviendo en este viaje, que por poco podríamos definir como sin retorno. La melancolía propia del paisaje y de un estilo de vida que está punto de desaparecer, se mezcla con el lenguaje fresco y ameno del autor. Otro de los buenos libros de Hernán Rivera Letelier.
hace 10 años