A pesar de su extensión y su complejidad, no se hace nada pesada. Es un excelente retrato de la sociedad americana tras los atentados del 11-S y mantiene su vigencia 20 años después (incluso acierta en muchas de sus predicciones). Los personajes resultan entrañables con todas sus contradicciones y penurias, cambiando de protagonista en cada parte y manteniendo el interés hasta el final. Primer libro que leo de Franzen, pero estoy deseando leer todos los demás.
hace 1 año