El rescate de una vieja locomotora del fondo de un lago de Montana, en 1950, es la punta del iceberg de una historia ocurrida décadas atrás. En 1906, el brillante detective Isaac Bell, se ve enfrentado a un ladrón de bancos sumamente hábil que está sembrando el pánico en el este de Estados Unidos, pues nunca deja con vida a los testigos de sus hazañas. Se trata de Jacob Cromwell, quien actúa con su hermana Margaret como cómplice. Las pesquisas de Bell terminan en una palpitante persecución a bordo de un tren, al más puro estilo del salvaje oeste americano.