Sylvanus Heythrop, un anciano que apenas es capaz de ocultar la ruina económica motivada por algún desacierto en las empresas que preside, solo tiene una preocupación: proteger a la viuda de un hijo que él tuvo fuera del matrimonio y que le dejó dos nietos alegres y atractivos en los que el viejo Sylvanus se reconoce. Hedonista, egoísta y valiente, consciente de que su tiempo tiene las horas contadas, se arriesgará a una compleja maniobra financiera para garantizar el futuro de su nuera, una mujer tan atractiva como frívola. El premio Nobel John Galsworthy vuelve a demostrar en El testamento del estoico su capacidad para moverse con la misma facilidad en novelas río como La saga de los Forsyte y en distancias más cortas, en las que logra una intensidad que absorbe al lector hasta las últimas páginas del relato.