Entretenida, como todas sus obras, pero con diálogos infantiles, un maniqueísmo exagerado (el tuareg es como un dios, perfecto en su conducta), una crítica a la famosa prueba deportiva atravesando el desierto un poco ingenua, aunque razonable... bueno, recomendable novela de aventuras

Buen libro de aventuras. Te hace reflexionar sobre los excesos de la cultura occidental frente a la supervivencia de los habitantes del desierto.

Me ha gustado mucho; no obstante, un poco menos que el primero. Si te gustó Tuareg tienes garantizadas otras buenas horas de ocio

En Los ojos del Tuareg, Alberto Vázquez-Figueroa, nos brinda con una novela marcada por una fuerte influencia periodística, denunciando los hechos que ocurren durante las pruebas de las carreras del Rally París-Dakar, donde ensucian el desierto, convirtiendo-lo en un vertedero, mal gastando recursos naturales que son necesarios a vida, como el bien más preciado por todas las formas de vida, "el agua". En las entrelineas, él autor, enseña a valorar "el agua", respetar la vida, la naturaleza, la cultura de otros pueblos, sus costumbres, así, como el hecho de que muchas veces, el dinero, no puede comprar todo lo que se necesita, donde muchas veces, se puede tener dinero, pero morir de sed, o calor, así como respetar la naturaleza. De esta novela, yo, llevaré muchas enseñanzas que pueden ser aplicadas en todas las etapas de la vida. ¿Les invito a leer el libro, y buscarlo que su autor nos enseña?

Esta novela nos hace ver lo injusto de la sociedad enriquecida y sus intereses, los cuales pasan, incluso, por encima de vidas humanas. Absoluta denuncia contra la situación de los menos favorecidos.

No lo leáis comparándolo con "Tuareg" porque saldría perdiendo. Pero es una buena novela de aventuras, que el autor aprovecha para denunciar las injusticias y la hipocresía del mundillo "París-Dakar" y de la gente poderosa en general.
La recomiendo.

Como se ve en las primeras páginas no llega al nivel de “Tuareg”. Ha sido una lectura entretenida y con mucha denuncia. Aproximadamente el último tercio de la novela hay bastante acción y aventura.
Uno de los temas principales son las leyes y la justicia, las cuales no son sinónimas y según sea la persona o la cultura se ven de diferente forma. También se detallan varios hechos delictivos e inmorales de los dirigentes del rally como de la sociedad y los políticos. A veces el autor insiste tanto que puede resultar repetitivo.
Como digo es inferior a “Tuareg”, pero merece la pena leerlo.

Lo leí antes que Tuareg y me gustó. Me hizo ver lo que encierra ¿la prueba deportiva? del París-Dakar. Una nueva forma de colonialismo, con las miserias de las gentes de África

Tras haber leído la primera parte ("Tuareg"), esta segunda decepciona. Puede que leyéndola de primeras parezca algo más. Aun así, recomiendo leerlo, aunque sólo sea para darnos cuenta del daño que hace la competición "París-Dakar" en este pueblo nómada.