No sé si es la mejor novela de Alberto VÁZQUEZ-FIGUEROA, que creo que no. Sin embargo, por motivos personales es la que a mí más me ha gustado. Además de explicar y detallar una realidad, es una oda a la supervivencia total, desde la infancia. Y una sociedad en que no respeta la infancia es una sociedad ancestral y que demuestra que no ha evolucionado, porque si por algo tenemos que estar a favor del progreso, no es por el bienestar en sí mismo en forma de consumismo, sino por ejemplo hacer que la infancia, sea eso, infancia...
hace 8 años
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