En la teoría de los archipiélagos conoceremos a Martín, un hombre de setenta años, jubilado, que decide volver al lugar en el que fue feliz cuando era joven para buscar una relación del pasado. Hecho que utiliza muy bien la escritora para poder presentarnos un libro narrado a dos tiempos con varias décadas de por medio.
En lo referente a la trama, me ha dejado un poco indiferente. Para mí, es el punto más débil de la novela. Quizás se deba a que a medida que avanzaba, me iba recordando a otras historias que ya había leído o visto con anterioridad. Por ejemplo, tanto el tema principal como algunas situaciones, me recordaron a la película "Brokeback mountain" y, precisamente, por tratarse de esta escritora pensaba que sería una historia más original.
Respecto a los personajes, Isaac me ha parecido mucho más atrayente que el resto, por su carácter más soñador o idealista. En contraposición, no he logrado empatizar con Martín a lo largo de la novela. No obstante, el personaje que me parece peor construido es Candela. No me ha gustado que se perciba como una mujer que menosprecia a su marido, que llega incluso a hacer una especie de maltrato psicológico constante... Parece una justificación para poder entrar en la trama que tenía pensada la autora, pero por eso mismo, el personaje ha terminado resultando bastante llano y falto de credibilidad.
Lo mejor de la obra es la escritura de Kellen, ya que vuelve a regalarnos algunas citas reflexivas para guardarnos, con su particular forma de observar y sentir el mundo.
También me gustaría resaltar la edición ya que es tipo edición bolsillo, muy manejable, con tapas gruesas e incorpora ilustraciones de acuarela que van acompañando al lector a lo largo de la lectura.
En resumen, recomendable si estás buscando una novela ligera, sin grandes pretensiones y con la que para pasar el rato, pero teniendo en cuenta que no es a lo que nos tiene acostumbrados la autora. (Gloria Mª Martínez Tarazona, 27 de diciembre de 2022)