Durante buena parte del relato, pensé que estábamos ante la típica novela de "género tierno", tan repetida. Bien escrita, su parte cruda, incluso cruel, la diferenciaba en cierta medida. A partir de la mitad de la historia, la novela va ganando un mayor peso al tiempo que la redacción adquiere un lado poético bien conseguido. Los personajes principales, madre e hijo, viven una relación compleja y dura que es el núcleo de la trama. Quizás encuentro en el exceso de tragedia un valor negativo porque no es fácil concentrar en una vida tantas desgracias: padre borracho y odioso, hija que se muere, abuela que se queda ciega, madre con cáncer terminal, niño que se vuelve loco y de adulto pierde las piernas en un accidente... (tranquis, no es spoiler, son circunstancias que forman parte del relato sin sorpresa)
hace 3 meses