Tiene matices de las mejores novelas de Preston y Child, pero aunque el final de la trilogía es bueno y cierra todas las puertas que los dos libros anteriores deja abiertas, carece un poco de ese toque de misterio que caracteriza otras novelas del detective Pendergast. No es un mal libro, pero tal vez esperaba algo más para el desenlace de esta trilogía.
hace 5 años