He leído el libro después de "No hay cielo sobre Berlín", libro de la misma autora mucho más extenso y que creo recomendable leer antes que éste. Más que nada porque éste me ha parecido una prolongación de "No hay cielo sobre Berlín", como una ampliación de un capítulo que ya aparece en el primero. La autora, Helga, nos relata en primera persona, cómo en su infancia, junto a su hermano y otros niños "privilegiados", fueron llevados a visitar el búnker de Hitler y a conocer al Führer personalmente. La diferencia entre la vida en el exterior y el interior del búnker es abismal. Helga nos cuenta, a parte de su visita al búnker, retazos de su infancia en el Berlín del final de la Segunda Guerra Mundial, donde ya sólo hay ruinas, cadáveres y miseria, y también pinceladas de su vida posterior lejos de Berlín. Interesante testimonio.
hace 10 meses