Con el título queda todo dicho. En base a esta premisa, la mayoría de protagonistas no tiene demasiados escrúpulos para mentir, engañar y, especialmente, para matar. Sirve al propósito de la obra pero los impulsos de los protagonistas me parecen demasiado irregulares, hasta caprichosos. De lo leído del autor me quedo, con mucho, con Germinal.
hace 6 años