El libro es sencillo, fácil de seguir, quizás un poco infantil, pero sólo un poco. Siendo de una autora de obras juveniles es imposible no caer un poco en el estilo propio. Pero es bien cierto que relata a la perfección la atmósfera asfixiante de la niñez de la protagonista y describe situaciones al estilo de Jane Austen: personajes mezquinos y egoistas que disfrutan atormentando al débil. Aunque creo que lo mejor es la historia de la autora que describen al final de la novela y que te hace entender mucho mejor su vida y la novela en sí.
hace 7 años