«En la magia –y en la vida – sólo hay el momento presente, el AHORA. No se mide el tiempo como se calcula la distancia entre dos puntos. El “tiempo” no pasa. El ser humano tiene una enorme dificultad para concentrarse en el presente; está siempre pensando en lo que ha hecho, en cómo podría haberlo hecho mejor, en las consecuencias de sus actos, en por qué no reaccionó como debería haberlo hecho.» EL ALEPH.