Una historia sencilla, emotiva, dulce y amarga a la vez. Me recordó mucho a Fannie Flaag, es cierto. Bonito paralelismo entre las abejas y la vida, también me gustó, como Lily aprende a conocer la vida. La pleicula no está mal, tampoco, al menos como no me esperaba nada, la encontré emotiva, aunque cambian algunos detalles, respecto al libro
hace 14 años
Amazon
Agapea