La traición de Isengard es el segundo volumen dedicado a la evolución de El Señor de los Anillos. En este libro, siguiendo a la extensa pausa en la oscuridad de las Minas de Moria con que concluye El Retorno de la Sombra, se rastrea la gran expansión de la historia en nuevas tierras y gentes al sur y al este de las Montañas Nubladas; la emergencia de Lothórian, los Ents, los Jinetes de Rohan y Saruman el Blanco en la fortaleza de Isengard. En breves esbozos y borradores a lápiz se asiste a la primera aparición de Galadriel, las primeras ideas sobre la historia de Gondor, el encuentro original de Aragorn y Éowyn, cuyo significado cambiará más tarde totalmente. Muchas de las primeras ideas y concepciones desaparecen a medida que la historia sigue sus propios caminos, como el relato de la captura de Frodo y el episodio en que Sam Gamyi lo rescata de Minas Morgul, escrito mucho antes de que J.R.R. Tolkien llegara a ese punto en la redacción de El Señor de los Anillos. Una característica importante de este libro es la historia de como nació el mapa original, redibujado en fases sucesivas, y que durante mucho tiempo fue la base de la geografía de la Tierra Media. Cierra el libro un apéndice dedicado a los alfabetos rúnicos tal como eran entonces, con ilustraciones de las formas y un análisis de las runas utilizadas en el Libro de Mazarbul encontrado en Moria junto a la tumba de Balin.