Y cómo recuerda este Escritor que alguna vez fue un prometedor Nextcritor y ahora es apenas un Excritor. Alguien que ya no puede escribir, pero que tampoco puede dejar de leerse y de releerse y de evocar cómo fue alguna vez y cómo ya nunca será. Alguien pensando en que "Inventar era recordar hacia delante. Soñar era recordar hacia arriba o hacia abajo. Recordar era inventar hacia atrás". Y aquí vienen de nuevo un juguete a cuerda marcha atrás y el fantasma de la electricidad; la encumbrada y borrascosa Penélope y su hijo perdido, 2001: A Space Odyssey y Blade Runner; el ausente Pertusato, Nicolasito y el ubicuo IKEA; la muerta Colma y la fallecida Zzyzx y la difunta Nothing y la inmortal Canciones Tristes; el irrealista Vladimir Nabokov y la surrealista familia Karma; Wish You Were Here sonando en teléfonos (in)movil(izantes) y la invitación a que entre Drácula; el perturbado Tío Hey Walrus y una pareja de padres modelos pero poco modélicos; The Beatles y The Beatles; un inexistente país de origen y una ciudad en llamas; una noche inolvidable que se querría reescribir; y tantas otras partículas aceleradas y fragmentos sueltos y células interconectadas en busca de una trama que los contenga y les de orden y sentido.