Esta historia de amistad de cuatro jóvenes que se conocen desde pequeñas porque viven en el mismo barrio, en la convulsa capital de Georgia, de la que la autora ya nos habló extensamente en la portentosa, La octava vida, me resultó pesada y falta de interés. En la trama surgen demasiados personajes, padres, hermanos, vecinos, con apellidos muy parecidos...por lo que la lectura resulta compleja. Muchos datos, fechas, países poco conocidos, Abjasia, Osetia... En fin, la terminé a trancas y barrancas, a base de dejarla y volverla a retomar.

Ha vuelto a engancharme. Después de :La Octava vida(impresionante), me leí La gata y el general y me decepcionó bastante pues no me enganchó y a punto estuve de abandonar. En este ,ya desde el principio me cautivó y aunque ha tenido momentos lentos, me ha parecido un libro fascinante sobre la amistad, la vida en un país que está lleno de rabia, sobornos, agresiones, violencia,...y como salir o intentar salir. Un libro muy bien escrito que me ha gustado bastante y que recomiendo