Que las redes sociales pueden destrozar la imagen de una persona no es algo que venga a descubrirnos Yomi Adegoke en su primera novela en solitario La lista. Pero sí que sirve para enfatizar un problema que tiene el mundo contemporáneo. En este thriller psicológico, está en juego la reputación de Michael, después de que un usuario anónimo haya incluido su nombre en un listado de hombres maltratadores, y lo haya subido a la red antes conocida como Twitter. Su novia, Ola Olajide, es una periodista que trabaja para una publicación de corte feminista, en la cual ha escrito reportajes denunciando temas como el machismo, abusos sexuales o la misoginia. Su jefa le ha pedido que publique un texto sobre esta lista, pero antes de esto la protagonista ya ha visto que su prometido aparece en ella.

Son jóvenes, guapos y disfrutan del éxito. Y están a un mes de casarse. El suspense está servido. Y la premisa de la trama es buena, de ella se infiere una buena dosis de intriga acerca de cómo actuará Ola después de darse de bruces con estas acusaciones anónimas vertidas en internet. ¿Y qué hace? Pues le pide a Michael que demuestre que no tiene nada que ver o no serán felices ni comerán perdices.

El libro está narrado en tercera persona. En cada uno de los capítulos esta voz nos cuenta cómo Michael y Ola, cada uno por su lado, van afrontando lo caro que sale que en las redes sociales cualquiera pueda verter información escudándose en el anonimato. Michael ha sido acusado de abuso sexual. En todo momento, por esta perspectiva omnisciente sabemos lo que piensan los personajes y cómo se comportan cuando están a solas o delante de amigos, familiares y compañeros de trabajo. Adegoke ha corrido el riesgo que supone que los lectores lleguen a las entrañas de Ola y Michael en un género como el thriller. El peligro es que al hecho de saber más de la cuenta solo le socorre una traca final.

Conocemos a Ola y Michael en su presente –la novela transcurre en Londres en el año 2019 unos días antes de su enlace matrimonial–, pero a la autora le ha faltado servir muchos más detalles de su pasado para entender a estos dos personajes que se habían conocido en 2016. Han sido tres años de una relación tortuosa, en la que sentirse inferior al otro ha dejado mella. Sus allegados no han sido ajenos a sus idas y venidas y la pluma de Adegoke sí que ha tenido puntería en detallar cómo reaccionan sus círculos más cercanos al enterarse de la noticia. Porque algunos pilares son muy sólidos hasta que tu ser querido es acusado de maltratador.

Sin embargo, que Michael haya sido descrito tan a las claras, que carezca de la ambigüedad que marea y engancha al lector por saber si es o no culpable, hace que La lista suspenda en intriga. Al principio se las prometía, pero ha resultado ser demasiado silente y sosegada. Los temas son pujantes en la actualidad de hoy, pero la novela no consigue estar a la altura en trascendencia. Le sobran unas cuantas páginas, se hace repetitiva y se resuelve en un breve capítulo final donde secretos, mentiras e infidelidades quedan expuestas al lector en un brote de ligereza. (Esther Martín, 3 de noviembre de 2025)