Creo que este libro no es lo suficientemente famoso, o no está lo suficientemente reseñado. En cualquier caso, yo me tiré a la piscina con él y resultó que estaba llena de agua. Como han mencionado otros críticos, el libro es una reflexión constante sobre la vida, la muerte, el alma, la inmortalidad, los avances científicos y sus consecuencias... todo ello muy bien logrado, muy bien hilado en todo el argumento. He de admitir que al comienzo me costó conectar con la historia, me parecía confusa y el relato, escrito a modo de diario personal, no me terminaba de enganchar, no entendía nada, pero llega un momento en el que empiezas a sospechar ciertas cosas, las cartas empiezan a ser desveladas y te encuentras con una obra gigantesca a pesar de tener solo 112 páginas. Muy fácil de leer, sobre todo por su dimensión, pero también por el lenguaje, no se hace pesado en ningún momento, lo que da facilidades para continuar con la historia. Lectura más que recomendable te lo aseguro.
hace 2 años