(Edición ilustrada).
Manuel Chaves Nogales, al elaborar este reportaje publicado en 1935, dejó modestamente que Juan Belmonte, con su primera persona, envolviera la totalidad de la obra. Pero el exilio de este periodista, debido a sus ideas liberales y republicanas, y su temprana muerte en 1944, provocaron que se olvidasen sus obras. Por fortuna, la reedición de este título en 1969 permitió la recuperación de su figura, porque la fascinación producida de nuevo por su lectura amplió el abanico de interesados. Ya no fueron solo los aficionados a los toros los propagandistas de la belleza y encanto de sus páginas. Otros lectores reclamaron la reedición de su restante producción, emprendiéndose así uno de los rescates literarios más justos de las últimas décadas. Mas no debe olvidarse que el desencadenante de este redescubrimiento fue la recuperación de este precioso libro, en el que su autor se sirvió de la difícil vida de un torero para mostrar los esfuerzos y conflictos de una España en transformación.