En Éste es el mar, Mariana Enriquez alcanza una nueva forma de escritura, hurga en lo macabro, atraviesa el universo de lo desconocido y lo monstruoso para posicionarse en un territorio poco explorado de la literatura argentina. Su prosa es tan adictiva como sombría e inquietante. Helena es fan de la banda Fallen. Una abeja más de un enjambre de jovencitas cuya vida se vuelve macabra y sórdida. Giras, sobredosis, carpetas con cuatro mil quinientas horas de archivos, amores enfermizos, aislamiento. Una lucha alocada por convertirse en la fan más fiel. Chicas que mueren con la foto de su ídolo y el estómago lleno de pastillas. Ritos de pasaje, adolescentes fanatizadas con estrellas de rock, inframundos donde conviven seres que han complotado para que Kurt Cobain, Sid Vicious y Jim Morrison mueran repentinamente...