Este libro nos habla de terapias que la medicina tradicional no acepta totalmente y que no están estudiadas científicamente (el libro está escrito en 2003), pero que realmente son efectivas. Trata de la terapia de los movimientos oculares, la incidencia de la luz y el ritmo biológico, la acupuntura, la alimentación, el ejercicio, la alimentación, la coherencia interna, la comunicación emocional... terapias que sí han sido validadas por la ciencia. Y es que actualmente se da más importancia al cuerpo en el tratamiento, olvidándonos de los pensamientos y las emociones, cuando realmente son claves para la salud mental y física. Hay que desarrollar la inteligencia emocional, y aquí cuidado que no es lo mismo que el coeficiente intelectual, son dos cosas distintas. La inteligencia emocional, al contrario que el coeficiente, puede desarrollarse y evolucionar, según el autor. Entonces, la clave está en unir psicología y biología, intentando evitar los largos tratamientos farmacológicos con pastillas. Es un libro muy interesante, muy bien documentado y con ilustraciones explicativas.