Este volumen reúne la totalidad de la obra cuentística de Ricardo Piglia, organizada por el propio autor poco antes de morir. La narrativa breve recorre toda su carrera literaria, y aquí encontrará el lector desde su primer volumen de relatos, publicado en 1967 (después revisado y ampliado con nuevos textos), hasta las últimas producciones en este campo, escritas al final de su vida, entre las que destacan Los casos del comisario Croce, homenaje y vuelta de tuerca al género policiaco que tanto amó Piglia. Y entre medio, las dos narraciones largas de Prisión perpetua y los volúmenes Nombre falso –que incluye un prodigioso homenaje a Roberto Arlt– y Cuentos morales. La organización de este libro permite por un lado apreciar la evolución del Piglia cuentista y por el otro disfrutar de su rica versatilidad. Su concepción del género le lleva desde unos inicios en que, según sus propias palabras, tomaba como modelos a Hemingway y Borges, hasta formulaciones cada vez más híbridas, abiertas y heterodoxas de la narración breve: contaminando deliberadamente el relato con la reseña, el cuento con el ensayo o la ficción con la autobiografía, Piglia elabora textos que cruzan una y otra vez las fronteras y trabajan con todas las variantes posibles de la narración: la autobiografía, el cuento policial, el relato histórico, la ficción teórica, el diario, el relato sentimental, el cuento fantástico.