Si hubiéramos sobrevivido, habría podido escribir el relato de la audacia, la resistencia y el valor de mis compañeros, y conmover con él a todo el pueblo inglés. Este borrador y nuestros cuerpos sin vida tendrán que contar la historia." El capitán Robert Falcon Scott escribió estas palabras poco antes de morir, a su regreso del Polo Sur, no lejos de un depot, que habría podido salvarles. Su expedición al Polo (1910-1913) encarnó todas esas cualidades de las que habla, y ha otorgado, tanto al propio Scott como a los otros cuatro miembros del grupo polar -Evans, Oates, Bowers y Wilson-, la categoría de héroes en los anales de la historia. El triunfo y la tragedia de la expedición constituyen un relato espléndido y revelador del imperialismo británico de comienzos del siglo XX. Esta obra es un digno tributo, no sólo a la colosal visión estética de Ponting, sino también a una magnífica historia de heroísmo y supervivencia en las condiciones más extremas.