Aunque maltrecho, Traspié ha sobrevivido a su primera misión como asesino del rey. En la corte casi todos desprecian su condición de bastardo, de modo que se propone permanecer en las lejanas montañas adonde ha ido a guarecerse.
Sin embargo, unos hechos de tremenda urgencia, y un amor que se tornará inalcanzable, lo llevan de regreso a Torre del Alce. Allí se reencuentra con las mortíferas intrigas de la familia real, mientras los Corsarios de la Vela Roja, renovando sus feroces ataques sobre la cosa, dejan a su paso aldeas calcinadas y víctimas enloquecidas. El reino está al borde de la guerra y el enigmático bufón real, al que Traspié consideraba su amigo, parece anteponer a todo lo demás su lealtad a un monarca que agoniza por una extraña enfermedad. Corren tiempos aciagos para los Seis Ducados, y quizá la salvación del reino esté en las manos de traspié... si acepta realizar el mayor de los sacrificios.