Qué fácil de leer resulta un libro cuando está bien escrito. Y cuánto oficio se aprecia en Anthony Burgess. La historia es impecable, la prosa fantástica, el estilo cuidado, rico y muy elaborado. "Vacilación" resulta un placer para los sentidos, una delicia para el lector más cultivado y en suma, el ejemplo más claro, que para hacer buena literatura no hay que llenar mil páginas de paja y misterio histórico, algo tan de moda hoy en día entre los best sellers. Con honestidad y un estilo preciosista, que no indescifrable, un escritor de calidad consigue pequeñas joyas como ésta. Sólo faltan lectores que las aprecien en un panorama literario en el que, cada vez con más frecuencia, lo que se valora y edita es la literatura al peso. Imprescindible.
hace 15 años