Una novela dedicada al lector de prensa de Nueva York de mediados del siglo XIX, con un fuerte carácter dickensiano, pero en la que ya afloran, sobre todo en los últimos capítulos, los grandes temas del autor de Hojas de Hierba. Walt Whitman nos conduce no solo por una trama plena de intriga, de malas artes y de buenos sentimientos, la historia de un malvado abogado y una huérfana en peligro, sino también nos lleva por las calles, las casas, las oficinas, los ríos y los camposantos de una ciudad todavía en formación, que terminaría en convertirse en la urbe más icónica del mundo.