Tras leer y disfrutar "Mi planta de naranja lima" , no podía dejar pasar la oportunidad de continuar la historia de Zezé en "Vamos a calentar el sol". Me resulta paradójico que la primera novela sea mundialmente reconocida y que esta segunda haya quedado relegada a su sombra, cuando, para mi gusto, "Vamos a calentar el sol" es mejor novela. Sigue tratando temas espinosos y sociales, aunque quizás desde una mayor distancia. Es aún más melancólica y mantiene la misma ternura. Te conmueve, te identificas, te hace recordar, sonreír, vuelves a sentir la libertad. El mundo vuelve a estar a nuestros pies de la mano de Zezé.
hace 3 años