Cuando pensaba que ya no le quedaba nada por lo que vivir, Cadegan se encuentra con distintos frentes abiertos que lo obligan a replantearse sus prioridades. Con el mundo convertido en un inesperado campo de batalla, el capitán arconte se ve obligado a sobreponerse a sus pérdidas a fin de proteger a aquellos que todavía siguen con vida. Aliarse con la irritante humana que conoció en el Hermes no entraba en sus planes, pero cuando sus caminos volvieron a cruzarse y ella se reveló como alguien que podía tener las respuestas que buscaba, supo que no iba a dejarla escapar. Lo que empezó como una breve asociación, terminaría convirtiéndose en un camino compartido desde hacía mucho más tiempo del que ninguno podía imaginar. Sora resultó ser mucho más de lo que parecía, sus conocimientos del enemigo eran inquietantes, pero no tanto como lo fue descubrir el pasado en común que los unía. Cuanto más tiempo pasaba a su lado, más temía que esa irritante humana abocada al desastre acabase metiéndose no solo bajo su piel, sino también en su corazón. Con las castas sobrenaturales convertidas en el objetivo de su enemigo y la humanidad señalada como la única responsable, Sora se da cuenta de que la única manera que tiene de detenerlos es aliándose con el capitán arconte y aceptar sus condiciones. Ese hombre tiene un verdadero problema con ella, pero incluso mientras discuten y pelean a cada segundo, saben que la única manera de conseguir resultados es aunando sus esfuerzos.Sora no está dispuesta a rendirse, ella mejor que nadie sabe de lo que es capaz ese monstruo y que la única manera de detenerle es dejarse la piel y el corazón en una carrera contrarreloj para evitar sus planes y destruirles desde dentro.El destino ha querido que en sus manos resida la llave para lograrlo, una que solo podrá utilizar si Cadegan permanece a su lado y la sostiene cuando el mundo empiece a desmoronarse a su alrededor. Las heridas del pasado son profundas, el corazón no olvida, pero quizá pueda volver a latir si le dan el motivo correcto para hacerlo… Han llegado hasta aquí juntos y solo la muerte puede separarlos.