Me llevó un tiempo empezar a apreciar este libro. Esperaba un Faulkner típico (el sur, el elenco habitual de familias de Yoknapatawpha, tragedia, elementos góticos, incendios) y terminé mirando pilotos de riesgo en New Orleans durante el Mardi Gras. Sentí que lo que tenía en el plato no era lo que habia pedido. Además, la novela es sumamente experimental en su uso del lenguaje, y está plagada de términos de aviación del período de entreguerras: era como si estuviera escrito en chino. Sin embargo, a medida que avanzaba, me fui encariñando con los personajes y fui captando la intertextualidad con Macbeth y "Prufrock" y "La tierra baldía", de T.S. Eliot, y eso cambió mi forma de leerla. Es sumamente compleja, y está llena de imágenes que refieren a la muerte, la sexualidad, el aburrimiento y el sinsentido. Definitivamente no la ubicaría entre las obras maestras de Faulkner, pero es una lectura interesante. Además, la adaptación cinematográfica, "The Tarnished Angels" de Douglas Sirk, sí constituye una obra maestra en sí misma, así que aunque la novela solo hubiera servido como materia para el film de Sirk, eso ya justificaría su existencia.
hace 8 años