¿Nunca quiso saber cómo era Alejandría en 1806? ¿O La Meca, con todo el embrujo de una religión desconocida? En las páginas de este libro están esas respuestas. Convertido al islamismo, Domingo Badía emprendió su peregrinación a La Meca en los albores del siglo XIX bajo el nombre de Ali Bey. Este libro no es sino su abultado diario de viaje. De Trípoli pasa al Peloponeso y de ahí a Egipto y Alejandría. Una vez en La Meca, el catalán Badía nos regala incluso la visión de La Kaaba, la piedra sagrada de los musulmanes. Continúa su viaje por Palestina y Jerusalén. En Siria se detiene en Damasco, para dar fin a su peregrinación en la antigua Constantinopla, capital del Imperio Otomano.