Criada en el hedonista planeta Drakan, Sheala aprendió una miríada de formas para complacer a un amante. Sin embargo, ella decide practicar las artes sensuales que había aprendido en el apuesto Gattan visitando a su familia. El viril hombre león con pelo dorado, orejas puntiagudas, y un tatuaje dragón del clan en su hombro la fascinaban. Sin embargo la enorme protuberancia entre sus piernas que parecía cobrar vida cada vez que ella estaba cerca fue lo que captó su atención primero. Oh sí, Marljas sería su primer amante verdadero. Desde el primer momento que Marljas divisó el curvilíneo cuerpo de Sheala y los traviesos ojos, él la quiso. Cuando ella accidentalmente le hirió, ella selló su destino. Ella le había hecho sangrar su cuello, reclamándolo en la verdadera tradición Gattan. Por todos los derechos, ella era suya. Pero después de que Sheala es secuestrada y torturada por un enemigo de la familia, la mimada, protegida mujer joven que ella había sido desaparece. Ella inicia la ceremonia de sangre que la ataría a Marljas para siempre. El fuego que él enciende en su alma hace mucho, mucho más.