Una novela muy bien escrita, llena de pormenores alrededor de los personajes, de las situaciones y del entorno. Tiene momentos excelentes, si bien toda la estructura construida invita a fabular con un final más amplio y completo. La novela va dejando intrigantes miguitas de pan que luego no llevan a ninguna parte. Como me ha pasado con otros libros de esta autora, las expectativas generadas son tan altas, que luego no es capaz de culminar a la altura de la propuesta. A modo muy personal, decir que me provoca un cierto rechazo la desafección con la que la autora trata a sus personajes. Cierto es que la literatura negra suele tener ese tono aséptico característico, pero en este caso hay una distancia entre los personajes y su realidad que no resulta natural y que contrasta con sus motivaciones. Sin embargo es un muy buen entretenimiento y algunos pasajes son un deleite para el lector que quiere saborear los momentos.
hace 2 años