Resumen

La novela expresa de manera inigualable el sueño de la clase dominante, aun hasta nuestros días: el sueño de un lenguaje común, el sueño de una sociedad transparente, uniforme, homogénea. El sueño de «El gran mestizo» o la cultura del mestizaje. Siempre hemos querido limar diferencias, cubrirnos todos con la misma identidad. La nación se fundó sobre las bases de un solo idioma (el español), una sola raza (un mestizo que tire a blanco), una sola regla (la del varón). La paradoja que se desprende de la novela, al leerla desde esta perspectiva contemporánea, es que la única realidad que logra transmitir el autor es la de la diversidad Cómo fundar, a partir de ella, una identidad, sin respetar los derechos de otro. En la novela fracasa la utopía.