Una recóndita ciénaga de Germania, donde los cuerpos de cientos de prisioneros sacrificados a los dioses emergen a la superficie siglos más tarde, devolviendo al presente el enigma de su existencia. Un reino remoto donde los mercaderes comercian con palabras. Un Aquiles cobarde que abandona Troya para disfrutar la vida que los dioses no quieren dejarle vivir. Un simulacro de campo de concentración construido por Hitler para burlar las inspecciones de la Cruz Roja Internacional. Una comunidad de robots abandonada que sigue anhelando el regreso de sus creadores. Quince relatos que forman una constelación sorprendente, en las orillas del tiempo: profecías y destinos subvertidos, ficciones tan fabuladas que igualan en valor a la verdad, paradojas de la historia. Una extraordinaria colección de relatos que nos transportan a mundos exactos y distantes y que sin embargo conectan entre sí, oscilando entre el presente, el pasado y el futuro –categorías que bien podrían ser equívocas–. Los que duermen, libro fundacional de la obra ya imprescindible de Juan Gómez Bárcena que recuperamos ahora en Sexto Piso, lo revela como un autor de un genio narrativo preciso, contundente y asombroso.