Los tios de Brett y Sabrina se casaron, y en las celebraciones de la boda, ella descubrio que le amaba. Pero era un amor imposible, porque Brett era un hombre hecho y derecho, y Sabrina apenas una niña con la que se divertía jugando. Años después, vuelven a reencontrarse, y se fragua una poderosa atracción, y aunque consuman su amor, la intervención del ambicioso primo de Sabrina que pretende quedarse con su dote, evita la boda entre ellos. Años después vuelven a reencontrarse, y aunque el odio se cierne entre ellos, la pasión volvera a introducirse en sus vidas, y acaban casandose. Sin embargo, todas las mentiras que les separaron saldran a la luz, poniendoles en peligro.