La división española, dirigida por Aitor, es enviada a Galicia para controlar el incremento de casos de brujería.Aitor conocerá a Nerea durante las fiestas del pueblo y comenzará con ella una relación no exenta de dificultades.Santiago es un sacerdote, exorcista, con gran experiencia en posesiones. Todo se complicará cuando la división tenga que hacer frente a una gran oleada de posesiones, la más escabrosa hasta el momento. “Las puertas del infierno se abrirán”, ese es el mensaje que repiten los demonios encarnados y que desconcierta a la división. La lucha entre el bien y el mal más absoluto jamás estuvo tan reñida.